Desde 2002 estamos  siguiendo una población de estornino negro en una dehesa de los alrededores de Madrid, a los pies de la sierra de Navacerrada. La colonia cuenta en la actualidad con 250 cajas-nido con una tasa de ocupación de casi el 98%. Cada año, dos meses antes de la puesta, se realiza una campaña de anillamiento en las cajas nido, lo que permite el control de la mayoría de los adultos presentes durante el año, y la posibilidad de obtener medidas biométricas, de coloración del plumaje, comportamentales, o muestras de sangre para la realización de medidas fisiológicas. La gran mayoría de los adultos están anillados y tienen implantado un microchip bajo la piel, lo que permite el seguimiento de las aves sin necesidad de capturarles de nuevo. Para ello, disponemos de lectores de microchips que se colocan de forma rutinaria en las cajas nido, lo que permite la detección de las aves y ofrece una medida de actividad en función de la época reproductora. Hacemos el seguimiento de la reproducción en toda la colonia desde marzo hasta principios de julio 

El seguimiento de la colonia y la realización de los experimentos que se diseñan cada año suponen una carga de trabajo importante. Por fortuna, aparte de la participación de postdocs, estudiantes de doctorado y técnicos de campo, cada año contamos con la participación  de estudiantes de grado y voluntarios de muchos países.

Esta galería es una especie de collage del trabajo de campo realizado en la colonia entre 2009 y 2014. Esperamos que sirva como muestra de agradecimiento a todos los que han pasado horas y horas, ya sea con frío, lluvia o calor, echándonos una mano en la dehesa. ¡Gracias!

(Todas las imágenes, a menos que se indique lo contrario, han sido tomadas por Lorenzo Pérez-Rodríguez)